jueves, 28 de noviembre de 2013

Las azaleas del amor VI


 

Queridos lectores después de un tiempo reaparezco para traeros el capítulo VI, ante todo dejadme ofreceros mis más sinceras disculpas por el retraso, varios avatares técnicos me han impedido seguir publicando pero en cuanto he podido  he vuelto y me dispongo a seguir  regalandoos trocitos de mi alma. Despidiéndome de noviembre y desando que Diciembre venga lleno de nuevas promesas y grandes sonrisas , un abrazo enorme para todos. Buenas noches.

 
capítulo 6

 
Realmente era un chico alegre como me habían asegurado y en absoluto se le veía afectado por la lectura del testamento. Era evidente que no le daba tanta importancia como su madre y su hermana lo habían hecho. Besó a Henrietta dulcemente en la frente y a mí fugazmente sobre los labios dejándome perpleja. Me sentía extraña. Bueno , era un chico muy atractivo y debo reconocer que ese beso no me sentó nada mal, a pesar de su espontaneidad. Pero acababa de conocerle y apenas sabía nada de él .Una enorme sorpresa me aguardaba -Bien¿Qué te ha parecido , no es encantador ? -Bueno yo  no se qué decir - dije un tanto extrañada ante esta pregunta que no me esperaba.-Es tan distinto a su madre. Ella creía que Theodora le dejaría la herencia a sus hijos , sin tenerte en cuenta para nada. Sin embargo , a la que ha olvidado ha sido a Emma. Nunca la quiso demasiado . A veces oculta todo lo que siente bajo una coraza de apatía, no obstante nunca nos ha demostrado debilidad de espíritu, a no ser mediante su eterna enfermedad. Los médicos aseguran que es cansancio, melancolía, pero no pueden diagnosticar  una enfermedad que en realidad no existe. Te pediría que la trates afablemente, por favor.
 
Asentí . Yo aún no tenía nada en contra de Emma . Mi intención era observar la evolución de todas esas personas hacía mí a partir de este momento.
Por la noche me quedé en el jardín hablando con Henrietta
-Esta tarde me quedé asombrada cuando descubrí a Francesca haciendo las maletas. No se donde pretendía marcharse esa loca. La dije que lo pensara bien y que te lo comunicara a ti . Espero que no te importe .
Henrietta estaba preocupada , pues Francesca había tenido una serie de ataques de nervios durante toda la tarde y decidió dejar esa casa que ahora era mía por derecho propio . Pensó que no podría soportar verme todos los días  y sentir que en cierto modo yo podía manejar su vida - No me importa en absoluto , tía . No te preocupes. Yo no pretendo cambiar nada. No os voy a echar aunque ahora esta casa me pertenezca - Gracias , pienso que realmente tu madre estaría orgullosa de ti.
Sonreí , intentando disimular la emoción ,  añoraba tanto la figura de mi madre , me gustaría tanto haber corrido a sus brazos, poder darla un beso de buenas noches , contarla como me sentía por dentro. Durante mucho tiempo era algo que daba por hecho . Me había acostumbrado a vivir sola , pero ahora con toda la gente a mi alrededor  era diferente. Sentía cierta envidia de la dependencia que Emma tenía de su madre aunque esta repercutiera negativamente en ella . Tía Henrietta había sido muy buena conmigo y yo la apreciaba , pero no podía sentir  a su lado algo más que un cariño sencillo , distinto al ambiente cálido de confianza y complicidad que existe entre una madre y su hija....
- Subiré a comunicarle a Francesca mi decisión. -Subí las escaleras con rapidez y golpeé la puerta de su cuarto -Adelante - dijo ella-  Eres tú ¿ Qué quieres ? -Verás , yo se que no te agrada mi presencia y que te encantaría que me marchara. Pues bien , quiero que sepas que yo no te considero mi enemiga y que me gustaría poder contar contigo al igual que con tía Henrietta. Creo que de esa forma nuestro día a día será más llevadero y grato para ambas. Puedes deshacer tus maletas , no te verás en la calle si de mí depende
- dije por mi parte - Bueno yo... creo que lo pensaré y si es como dices , estoy segura que podré compensarte de alguna manera-dijo con voz metálica.

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario