La música no se toca

 

 Hoy mientras disfruto de una pequeña tarde de domingo con “mi soledad y yo” como hacía tantas tardes que no tenía por  tanto trabajo y un poco convaleciente también, me he puesto a escuchar la música que me gusta, que me hace estar viva, que me obliga a seguir soñando y a seguir buscando ilusiones para que la rutina de mi día a día no me derrumbe y termine conmigo a veces es duro no dejarse vencer.

Pues en este momento de soledad y paz interior uno de los discos elegidos fue el del maestro Alejandro Sanz “La música no se toca” y me remonté al día 25 de junio de 2013, dónde disfruté de un magnífico espectáculo a la par que grandioso y emocionante donde Alejandro no dudó en darlo todo y regalarnos a  los      que allí estábamos una profunda noche de sentimientos, emociones y recuerdos.

Todo comenzó como una gran aventura, grandes velas erguidas sobre el escenario nos hacía pensar por dónde saldría  tan esperado artista. Y finalmente una proyección de sombras del cantante en varias ventanas introdujo su entrada al espectáculo. A partir de ahí una cascada de canciones de su nuevo disco y de grandes éxitos que todos recordamos matizado con amplio despliegue audiovisual de vídeos de lindas imágenes dignas de cuentos, fuegos artificiales hechos con los focos, luces que suben y bajan, mención especial su “desde cuando “con el sol proyectado y emocionando a todo el mundo.

“camino de rosas fue otro himno coreado “con hermosa lluvia de pétalos sobre Alejandro.

En esta ocasión el cantante no actuó sólo, iba acompañado de un coro de mujeres todas ellas con voces espectaculares que le arroparon de forma impecable y demuestra una vez  más la humildad del artista.

También fue muy emocionante cuando con acordes de piano recordaron canciones de ayer que a todos nos movían recuerdos aunque  las más fieles echamos de menos su “lo ves “ al piano.

Nos quedamos con ganas de más y esperamos verte más pronto que tarde de nuevo por Madrid.

Si alguien aún tiene la oportunidad de ver la gira yo la recomiendo, para vivir un viaje  que no te dejará indiferente y la sentirás con cada poro de tu piel.

Una vez más gracias Alejandro por seguir creando y hacernos sentir tan especiales.